viernes, 6 de abril de 2018

LE BRIO









UNA RAZÓN BRILLANTE (Le Brio)

Una entrada en el mundo de sus sueños, el de acceder a la universidad y empezar derecho, se convierte para la protagonista, una chica del extrarradio de origen inmigrante, en un mal sueño.

Por culpa del enfrentamiento con el típico profesor, que está por encima de todo y la ridiculiza delante de toda la clase.

Partiendo del malestar que provoca en el claustro, ese comportamiento xenófobo, el abuso verbal con una estudiante, mujer de cultura foránea y económicamente débil, obliga al rector a tomar una decisión salomónica.

El profesor pillado en unos exabruptos públicos fuera de tono y lugar, deberá preparar a la novata para una prueba de debate universitario.

Así tenemos dos personalidades totalmente dispares, enfrentadas y despreciándose, colaborando en algo en lo que al principio no creen.

Para eso está la película, para hacernos ver que podemos entendernos con cualquiera y que la palabra y las formas, pueden llegar a serlo todo, ante la sociedad.

Una especie de versión moderna y actualizada de Pigmalión, sin apuestas por en medio y con una parte que se juega su prestigio y la otra, sin saber el juego, intentando superar sus carencias por origen social.

Un film, fácil de ver, con unos diálogos interesantes de seguir, que nos van mostrando todos los tópicos habidos, en eso del enfrentamiento entre orígenes.

No hay concesiones para sentimentalismos baratos. Que nadie se llame a engaño. Un profesor maduro, del que poco muestran de su vida y una estudiante magrebí, del suburbio no conflictivo de la capital francesa; de la que muestran algo más de sus condiciones familiares y sentimentales, pero lo justo como para hacerse una idea.

Lo importante, es como a través de la formación de la alumna, vas descubriendo el enorme valor de la palabra, de la presencia, del saber estar, del saberse contener y dominar al contrario dialécticamente.

Siempre la fuerza de la palabra, fundamental en el mundo de la abogacía y los tribunales.

La verdad es que me ha encantado y la recomiendo vivamente.

Sarrià, 6 Abril 2018


12 comentarios:

  1. Pues habrá que verla, porque la fuerza de la palabra está en crisis. Cada vez hay menos y peores oradores. Los mundos de los que cada cual procede no debería ser excusa para entenderse, como dices.

    Un beso

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  2. Tomo nota.
    Algunos políticos deberían verla.

    Saludos.

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    1. Harás bien.
      No se yo si los alcornoques son seres receptivos.
      Saludos.

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  3. Soy fiel creyente del poder de la palabra en la tarea civilizadora. Habrá que verla.

    Saludos!

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  4. Me la apunto para no olvidar, y como dice toro, sería bueno que algunos politicos la vieran...
    Feliz semana.
    Un abrazo

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    1. Seguro que te gustará, es para mentes abiertas, no sé si con eso pueden ellos ...
      Feliz semana.
      Un abrazo.

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  5. Interesante propuesta que apunto.
    Siempre me han molestado aquellos que abusan del poder ridiculizando.
    Gracias Alfred.
    Un beso

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  6. Seguro que merece la pena verla... ya me gustaría tener ojos para ello, porque parece interesante.

    Saludos.

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    1. ¡Claro! En tu caso la podrías seguir, pues lo importante es la palabra, el uso de ella.
      Es una obra muy interesante.
      Saludos.

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