Imagen obtenida de internet
Joan Margarit
(1938-2021)
Ha llegado este tiempo
cuando ya no hace daño la vida que se pierde,
cuando ya la lujuria es tan solo
una lámpara inútil, y la envidia se olvida.
Es un tiempo de pérdidas prudentes, necesarias,
y no es un tiempo de llegar,
sino de irse. El amor, ahora,
por fin coincide con la inteligencia.
No estaba lejos,
no era difícil. Es un tiempo
que no me deja más que el horizonte
como medida de la soledad.
Un tiempo de tristeza protectora.
(De No estaba lejos, no era difícil, 2010)
Se nos ha ido un poeta, cosa que en estos tiempos de pandemia, deja una huella aún más dolorosa de lo que una pérdida es. Por aquello que son tiempos de mayores lecturas, de encuentros con las letras en plan sosegado y de deleite o descubrimiento enriquecedor.
Era un poeta apreciado por la crítica y lo más importante y que se da poco, por el público lector, pues era leído.
Tenía y gozaba de buena prensa, su sentido común era apreciado en momentos de enfrentamiento cotidiano.
Nos queda su obra que no es poca y un recuerdo de una buena persona, maestro de arquitectos y de aprendices de poeta.
Barcelona, 17 febrero 2021